El dibujante y músico chileno presenta «Me Voy A Valparaíso», una canción que cuenta con la colaboración del músico noruego Erlend Øye, también conocido por su trabajo en Kings of Convenience y The Whitest Boy Alive.
El talquino Diego Lorenzini continúa con los adelantos al inminente estreno de su tercer disco de estudio titulado «De Algo Hay Que Morir», programado para finales de agosto de este año. En esta ocasión nos presenta «Me Voy A Valparaíso», un vals lleno de humor y melancolía que narra los altos y bajos del oficio como músico independiente, y que incluye al puerto de la quinta región como escenario y protagonista. Esta apología a la tozudez creativa cuenta con la compañía en voces del músico noruego Erlend Øye, con quien Lorenzini entabló amistad cuando giró por Alemania en su Tour Acústico junto a la Matiné Uva Robot. Cabe recordar que el año pasado, el colectivo de cantautores formado por Niña Tormenta, Rosario Alfonso, Javier Bobbert y Diego Lorenzini abrió a teatro lleno los conciertos del líder de Kings of Convenience y The Whitest Boy Alive en Munich, Leipzig, Colonia, Hamburgo y Berlín.
«COMPARTIR LAS BUENAS Y MALAS»
«Me Voy A Valparaíso» fue producida por Diego Lorenzini junto a Martín Perez Roa (aka Merci) en Estudios Niebla y masterizado en cinta por Arturo Zegers en Estudios Triana. Además del feat. internacional en las armonías por parte de Erlend Øye, esta canción cuenta con el apoyo en guitarra criolla de Javier Bobbert y de Rosario Alfonso en coros. Estos últimos también forman parte de otras canciones del disco en donde tienen un rol más protagónico, ya que en palabras del propio Lorenzini: «…De Algo Hay Hay Que Morir es un disco que se alimenta del cariño y admiración que siento por las personas que he conocido a través de la música, y para estas nuevas canciones me he podido dar el lujo de componer pensando en otras voces aparte de la mía. Para mí es un tremendo honor poder contar con cameos protagónicos de Rosario Alfonso, Javier Bobbert, Chini.png, Niña Tormenta, Simón Campusano y Erlend Øye, ya que con ellos he aprendido a seguir poniéndole el hombro a las dificultades de este oficio, y a seguir espantando los males cantando…»
