Una de las artistas más prodigiosas del jazz actual, Nubya García, arrancó su primera gira por Sudamérica, siendo nuestro país el primero de las 3 fechas que tocará por el continente
incluyendo Argentina y Brasil, por lo que somos bien afortunados haber podido presenciar anoche un acto de maestría total. Con tan solo un EP y LP la saxofonista ha dado de qué hablar alrededor del mundo por su talento innato en el instrumento de viento, ganando hasta incluso premios de primera clase como los Jazz FM Awards.
Refugiados en el Club Subterráneo del frío asesino, pudimos recuperar energías con la entrada de la mágnifica García acompañada de sus 3 músicos en batería, contrabajo y piano, una formación clásica del estilo musical; fue la primerísima para perder el frío y hasta incluso nos dejó bailando y disfrutando al ritmo del saxofón y piano estilo reggae. Con interludios e improvisaciones entre medio, la canción llegó a durar 15 minutos pero los oyentes no dejaron de moverse ningún segundo, y esto estaba recién empezando.
Agradeciendo siempre a todos por la asistencia, la compositora irradiaba su alegría a todos de poder venir a tocar desde tan lejos. Continuando con los demás músicos demostraron su técnica y destreza en solos o improvisaciones que iban intensificando firmemente el tema. Pero por sobre todos, el baterista Sam Jones fue el que más brilló por su increíble precisión y rapidez, llevándose los mayores aplausos por la multitud.
Tras las extensas piezas de su álbum “Source”, Nubya nos sorprendió con un tema inédito que hasta incluso no tiene nombre, por lo que sugirió que le ayudáramos con uno. Compuesto por líneas fascinantes mantenían la canción ecléctica y espaciosa, llena de colores que se podían ver salir del saxo que iluminaban el club y el alma de las personas.
La británica se ganó el corazón de todos los presentes desde el momento en que tocó la primera nota, por lo cual fue muy triste despedirse con su última canción. Una explosión de sonidos lleno de texturas ricas, tanto en lo complejo como en la belleza, lograba mover a cada asistente con bailes, aplausos y hasta un impulsivo “Wow” se liberaba de las bocas de
muchos.
Un show completamente notable de inicio a fin, donde pudimos gozar de una bella jornada de jazz comandada por la reina del viento Nubya Garcia. Un hecho que pasará a la historia haber recibido a una de las compositoras más destacables de los últimos tiempos. Ahora es solo cosa de tiempo que su fama y reconocimiento vaya aumentando, pero creemos totalmente que ella pasará a ser una figura destacable de la música.