Por Ignacio Bataller

En la actualidad, es poco común que una banda lance un segundo álbum en el mismo año de su debut con disco incluido. Sin embargo, si retrocedemos en el tiempo, esta práctica era algo más que habitual.

Un claro ejemplo es 1979, cuando Simple Minds, insatisfechos con el resultado de su primer álbum Life in a Day, decidieron aprovechar cuatro canciones que habían quedado fuera: «Premonition«, «Factory«, «Calling Your Name» y «Changeling».

A partir de ese material, ingresaron a los Rockfield Studios y, en solo cinco meses, dieron forma a su segundo disco, Real to Real Cacophony, que se lanzó el 23 de noviembre de ese mismo año.

Este álbum refleja claramente la influencia del krautrock alemán, con sonidos que evocan a bandas como Neu!, Kraftwerk y La Düsseldorf. Simple Minds logró alejarse del estilo de su debut, entregando un trabajo que fue mejor recibido por la crítica y que les dio el impulso necesario para avanzar en su carrera.

Hoy, décadas después, el legado de la banda se celebra en escenarios como el Movistar Arena, recordándonos que su historia trasciende más allá de ser «la banda de una buena película».

Rescatando lo mejor de su álbum debut y sumando nuevas influencias, la banda vuelve a destacar su faceta más progresiva y la calidad musical que les permitió continuar creciendo hasta alcanzar el lugar que ocupan hoy.

Compra tu entrada para Simple Minds vía Puntoticket.