Por Juan Kattan
Si consideramos a un artista que está pegando con una canción hasta ahora, Benson Boone estaría en esta categoría. No quiero decir que «Beautiful Things» sea un one-hit wonder, me refiero a que aún falta conocer más música de él para evitar que quede solo como una canción que pasó al olvido, mientras el artista también queda en el anonimato.
Si bien el artista tuvo su paso por el programa de talentos American Idol, ha logrado destacarse por sí mismo con su álbum debut Fireworks & Rollerblades. Además, su paso por Lollapalooza Chile lo posicionó como una superestrella, con un sold out en el Teatro Coliseo la noche anterior. En el escenario Cenco, cuando la tarde comenzaba a decaer, este joven de Washington logró deleitar y hacer suspirar a más de una quinceañera que lo acompañó para cantar sus canciones.
El show comenzó con «Sorry I’m Here for Someone Else«, que incluyó acrobacias durante la canción, un extra que le dio emoción a la presentación y evitó que fuera tan plana, como ocurre con otros actos que hemos visto a lo largo de los años. Benson repasó gran parte de su primer disco, además de interpretar algunas canciones de su EP Pulse y también temas de lo que sería su segundo álbum, que por lo que se ve, está pronto a salir.
En el set, sonaron temas como: «Drunk In My Mind», «There She Goes», «The Momma Song» y, para finalizar, su gran éxito «Beautiful Things», con un público rendido a sus pies y disfrutando de la cercanía de este joven artista. Él se mostró cercano con su audiencia, interactuando de manera entretenida y hasta hablando algunas palabras en español para conectar más con su gente en Chile.
