Por Ignacio Bataller
Fotos por Francisco Aguilar – Spider prod.
Gracias a este épico viaje liderado por Jarvis Leatherby, miembro de ambas bandas, se ha hecho realidad la esperada gira sudamericana de Night Demon y Cirith Ungol, un exclusivo 2×1 para los fervientes seguidores del sonido clásico del heavy metal.
La fiesta comenzó tras la apertura de puertas a las 19:00 hrs, y solo media hora después, la Sala Metrónomo resonó con las primeras notas de la noche. Los santiaguinos de Ancient Doom fueron los encargados de abrir el escenario con su épico doom metal, regalando a los más puntuales cuatro poderosos temas de un sonido que fusiona el doom con un heavy metal acorde a lo que estaba por venir.
A las 20:30 hrs, Jarvis Leatherby y Armand John Anthony dieron inicio a su intensa doble jornada, presentándose primero como Night Demon. La banda desató ocho de sus grandes canciones ante un público que llevaba mucho tiempo esperando este debut.
Temas como Outsider, Dawn Rider, The Howling Man y la homónima Night Demon, marcaron una presentación cargada de energía, digna de un show de estadio. La música nunca perdió intensidad, y poco a poco la banda contagió su energía a la audiencia, que pasó de moverse tímidamente a corear los estribillos y gritar el nombre de la banda hasta su última nota en el escenario.
Para cerrar esta poderosa noche de heavy metal, llegó el momento de uno de los debuts más esperados del género. A las 21:30 hrs en punto, Jarvis Leatherby y Armand John Anthony regresaron al escenario, esta vez acompañados por Robert Garven en la batería y el legendario Tim Baker en la voz, todos juntos bajo el imponente nombre de Cirith Ungol. Con más de 50 años de historia, la banda jamás había pisado suelo chileno, pero esa historia cambió esta noche.
A lo largo de 13 canciones, recorrieron toda su trayectoria y demostraron que aún conservan la magia que los convirtió en leyenda, en especial con la voz de Tim Baker brillando en I’m Alive, Frost and Fire, Black Machine y King of the Dead. La banda cumplió con creces el anhelado encuentro con sus fanáticos chilenos, saldando una deuda con la época que vio nacer este estilo de música. Y al cerrar con Join the Legion, escribieron un nuevo capítulo en su inmensa historia, esta vez con Chile incluido.
