Por Ignacio Bataller
Fotos por Francisco Aguilar – Spider prod.
Somos muy afortunados de contar con espacios como estos. El primer Cl.Prog surgió casi de manera improvisada al combinarse tres conciertos que estaban separados. Hoy, en su segunda edición, se percibe aún más la identidad de un festival que emergió de la nada pero que llegó para quedarse.
En un Teatro Caupolicán casi lleno, cada una de las bandas pudo desarrollar sus sets sin ningún problema y de manera expedita. Realmente, cada una de las bandas conquistó al público de principio a fin.
Los músicos de Octopus, en su formato dúo, inauguraron la segunda edición del festival con su poderoso estilo djent, estableciendo el tono para el resto de la velada y animando a los primeros asistentes que llegaron al lugar.
Después, llegó el turno de los israelíes de Orphaned Land, quienes trajeron consigo su distintivo estilo de metal progresivo, fusionando diversos sonidos de su tierra. Canciones como «All is One», «Like Orpheus» o «Sapari» mantuvieron al Teatro Caupolicán constantemente vibrante con cantos y bailes, convirtiendo el evento en una verdadera fiesta.
La presentación de Gong era una de las más anticipadas en este festival. El debut de esta legendaria banda de la escena clásica del space rock fue un espectáculo impecable, sin errores ni fallos de cálculo. La banda envolvió por completo al teatro, llevándolo en un viaje durante todo el set y haciendo de este debut algo perfecto.
Al igual que en la primera edición, Alcest destacó notablemente en la velada. Sin embargo, en esta ocasión, ese título lo ostenta Mono, la banda que presentaba un sonido más diferenciado en comparación con el resto del cartel. Los japoneses trajeron consigo toda la emoción y melancolía de su post-rock. A pesar de una leve falla durante su actuación, esto no impidió que ofrecieran uno de los mejores conciertos del año.
Los daneses de Vola vinieron a consolidarse como una de las mejores bandas nuevas y modernas de metal progresivo. Después de un debut perfecto en 2022 en el club Chocolate, en su segunda visita lograron atraer significativamente a más público y no se notó diferencia alguna. Con temas como «Alien Shivers» o «Straight Lines», la banda tuvo al teatro en la palma de su mano, creando una atmósfera de perfección.
Los polacos de Riverside tuvieron el honor de cerrar esta segunda edición del festival. Creo que, entre todas las bandas actuales de rock progresivo en ascenso, esta era la idónea para encabezar el cartel. Con su último disco, «Id.Entity», alcanzaron un nuevo peldaño en su camino hacia la cima, y hoy se consolidaron con un espectáculo en el Teatro Caupolicán, brindando un broche de oro al Cl.Prog 2024.